Blog de Consuelo Mar-Justiniano: Entrevistas, artículos, poemas y otros textos para amantes de la palabra, profesionales de medios, seguidores de literatura y estudiantes.
jueves, 26 de junio de 2014
NO ESCOGÍ TU VESTIDO POSTRERO
Lamento que jamás nos despedimos…
Javier Ávila
No escogí tu vestido postrero
lo dejaste tendido sobre tu cama
donde después de dos años, once meses y diecisiete días aún yace tu cartera,
y tu bulto con la ropa y las demás cosas que habías traído a mi casa.
Todo está casi intacto
sobran las telarañas, el polvo, el abandono, la ausencia inoportuna,
la soledad añeja.
Mucha ropa y zapatos y prendas y cosméticos y cosas y cosas,
muchas cosas tuyas.
No escogí la caja que guardaría tus restos
no recuerdo el color
solo el mínimo detalle de que ya no eras quien eras,
que no pude mirar más que una vez el cuerpo que te suplantaba:
extraño, ajeno, vacío, profano;
sin expresión de ti misma.
Cuerpo que no toqué,
cuerpo que no despedí,
cuerpo que quedó vacío de tu amor y el mío.
No escogí el mensaje que se imprimiría en tu tarjeta fúnebre
mucho menos escribí lo que no podía decir
ni lloré las lágrimas que se habían petrificado,
ni grité los gritos que se habían quebrado.
Solo estuve allí como una autómata,
como un extra en la película de la que era protagonista.
Hoy día aún te busco en cada cosa viva a mi alrededor
y me enfurece encontrarte en mis sueños otra vez muerta,
o enojada conmigo,
sin quererme.
No escogí este conjuro que me tortura
porque tú sí me querías.
Ahora que soy madre de la nieta que no conociste
comprendo inútilmente lo que ya no existe.
Inconcluso.S
viernes, 20 de junio de 2014
"La lectura es una llave hacia la libertad..."
La
conocemos en su faceta de periodista, pero también tiene dotes de artista.
Yolanda Vélez Arcelay lleva alrededor de 21 años en el periodismo, y en el 2001
nos sorprendió con su primera exposición
de pintura.
“Me gusta mucho el Expresionismo porque se basa en
el uso de la forma y el color. No me gusta la abstracción. Yo pienso con
palabras, necesito un lenguaje figurativo. Necesito ordenar las imágenes en mi
mente para poder plasmarlas.”
Yolanda
Vélez Arcelay nació en Las Marías. Hizo un bachillerato en Comunicación y tomó
cursos de Historia , a nivel de maestría,
en la Universidad de Puerto Rico (UPR), recinto de Río Piedras.
“A mí me encanta la historia y creo que, de
algún modo, el periodismo y la historia
tienen mucha relación. Los periodistas somos los cronistas de nuestra
época”.
Vélez
Arcelay ha trabajado en prensa escrita, radio y televisión. Actualmente es
periodista de Las Noticias Univisión y cubre, mayormente, el área de política.
Ella
afirma que la lectura la ha ayudado a comprenderse mejor y a entender los
puntos de vista de las demás personas. Los tres libros que más le han impactado
en los últimos siete años son: Sidharta,
Demian y El alquimista.
Sidharta, de Hermann Hesse, es un libro
que narra la transformación en la vida de Buda. Éste era un hombre que vivía
para ayunar, ser pobre y ser paciente.
Sin embargo, a lo largo de su vida, descubre el amor, el dinero y la buena
comida. Finalmente, va entrando en la complejidad del mundo y se da cuenta de
lo importante que es vivir una vida plena: sufrir y ser feliz.
“La esencia de este libro es que
nadie aprende de nadie. Aprende por su experiencia. Tienes que vivir tu vida para
valorarla. Ese libro me marcó, lo he retomado en otras ocasiones y lo he
recomendado mucho”.
Demian, también de Hesse, es
la historia de Emil Sinclair. Un niño que ve más allá de su entorno familiar el
otro mundo que le rodea, un mundo que
teme, pero que le fascina. Demian es la búsqueda del auténtico yo a
través del rechazo de lo preestablecido.
“Es
muy buen libro, es una historia realista y conmovedora. Además, Herman Hesse es un filósofo que llega a uno
de forma profunda y emotiva”.
El alquimista, de Paulo Coelho, es el relato
de un muchacho pastor que recorre un largo sendero entre el mundo real y el
mundo de los sueños. Es, esencialmente, la historia de la humanidad en busca
del mayor tesoro que se anhela poseer: el sentido de la vida.
“El pastor de ovejas quería llegar a
Egipto y todo lo que le va pasando en el camino le hace entender que el
trayecto es más importante que el mismo objetivo. Me impresionó tanto que me
ayudó a redefinir mi inclinación hacia la pintura, a lanzarme de pecho, a perder
un poco el miedo. El libro plantea que cuando uno quiere una cosa hasta el
universo conspira para que lo logres. No
podemos dejar en un segundo plano los sueños, uno tiene que realizarlos”.
Vélez Arcelay comentó que la lectura
la ha transformado. “La lectura ha cambiado hasta el modo de ver a mi hijo. Yo
aprendo de él y lo dejo que él aprenda. No pretendo anular sus caminos porque
él necesita recorrerlos para madurar. La lectura me ha enseñado a tener más
tolerancia”.
La
Periodista no tiene criterios específicos para seleccionar un libro. Lo que le
resulta imprescindible es que sea una lectura que le haga reflexionar. “Leer
pone en orden mis pensamientos y mi mundo interior”, comentó.
Además, la lectura ha mejorado su capacidad de
comunicación oral y escrita. “Me ayuda mucho a hacer síntesis, a manejar el
idioma para seleccionar la palabra correcta y
llevar la idea que quiero. En televisión hay que ser muy preciso y el
manejo de la lengua es el punto clave”.
En cuanto a la importancia de la
lectura expresó: “La lectura es vital para la mujer y para el hombre, pero
particularmente para la mujer. La
lectura ha sido clave para que nosotras hayamos empezado a lograr metas, a
incursionar en nuevas profesiones y realizarnos
plenamente. Yo creo que la lectura
es una llave hacia la libertad individual”.
NOTA: Este artículo es parte de la serie de entrevistas "Qué libros leen la profesionales puertorriqueñas del siglo XXI", 2003.
lunes, 9 de junio de 2014
"Los libros son como los mejores amigos..."
Una carrera intensa. Veintiocho años difundiendo la noticia. Luz
Nereida Vélez Rosado ha dedicado gran parte de su vida al periodismo.
Estudió Comunicación en Duquesne University, Pensilvania. Laboró, como
periodista, los primeros cuatro años en Mayagüez (su pueblo natal) y los
siguientes veinticuatro en San Juan. Es una de las figuras anclas de Noticentro
4.
La periodista Vélez considera que la lectura es muy importante y que un
texto es un buen compañero y una gran fuente de aprendizaje. Los tres libros
que más le han impactado en los últimos siete años son: El devocionario de
su ángel de la guarda, La firma y Cien años de soledad.
El devocionario de su ángel
de la guarda, de Bárbara Mark y Trudy Griswold, es un libro de
oraciones y consejos que ayuda al lector a mantenerse en comunicación con su
ángel de la guarda. Luz Nereida Vélez lo relee cada vez que puede porque, a
través de él, ha aprendido a aceptar a los seres humanos tal como son y también
a ser más tolerante. “Desde niña me enseñaron a orarle a mi ángel de la guarda
y en los últimos años me he dedicado a leer todo lo que tiene que ver con los
ángeles”.
La firma, de John Grisham, es otro de
sus libros favoritos. Ésta es la historia de un joven que se traslada con su
esposa a Memphis, Tenesí, para trabajar en una firma de abogados. Rápidamente
su situación económica cambia favorablemente, pero se da cuenta de que lo que
parece ser una respetable firma de abogados no es más que una tapadera de
mafiosos. Más tarde se tiene que someter a la dura decisión de denunciar al FBI
las misteriosas actividades del bufete o dejar que sea el propio FBI quien lo
denuncie a él. Este libro impactó a la periodista porque por medio de él ha
aprendido acerca de cómo hacer investigaciones y llevar objetivamente la
noticia al pueblo.
“Yo me he vuelto fanática de John Grisham,
tengo todos sus libros. Él escribe mucho de casos donde están involucrados los
abogados y a mí las leyes me han apasionado siempre. Cuenta historias que en
realidad han ocurrido, y como persona activa en el campo de la comunicación me
encanta relacionarme con lo que ocurre a diario”.
Cien años de soledad, de Gabriel García
Márquez, relata la historia de la familia Buendía en el pueblo ficticio de
Macondo. La soledad a la que alude el título afecta a todos los personajes de
forma tal que se convierte en hilo conductor de la trama. Todos son seres
solitarios en esencia, todos crean un universo particular dentro del pueblo o
de la casa familiar. El destino trágico de los personajes se trasmite de
generación a generación como si se tratase de una herencia.
“De Gabriel García Márquez Cien años de soledad es un libro que marca una huella bien
profunda en la
vida de cualquier ser humano y le hace entender muchas cosas, y aprender, y yo creo que lo más importante
que se puede obtener de los libros es el aprendizaje”.
De estas tres obras, las lecturas de los ángeles son las que más han
cambiado la forma de pensar de Luz Nereida Vélez. A través de ellas ha
aprendido a manejar las dificultades que todo ser humano puede tener.
Profesionalmente también la han ayudado porque al influir, positivamente, en su estado de
ánimo, ha aprendido a construir de todo
lo negativo aspectos positivos.
“Para mí la lectura es básica, yo creo que los libros son como los
mejores amigos, no importa que estés sola o acompañada el libro está ahí como
un fiel compañero”.
Para seleccionar lo que considera un buen libro no tiene criterios en
particular, pero prefiere aquellos que estén llenos de misterio y que la
mantengan en suspenso hasta el final. “Por eso los libros de Grisham y de
García Márquez me gustan, porque logran captar mi atención y todo el tiempo
mantenerme pendiente de lo que estoy
leyendo”.
La periodista Vélez prefiere leer los libros en su idioma original
(trata de evitar las traducciones) porque
considera que así aportan más y le ayudan a mejorar su capacidad de comunicación oral y
escrita (sea en inglés o en español)
ampliando su conocimiento y el vocabulario, dos aspectos imprescindibles
en su trabajo.
“La lectura es muy importante para la mujer actual porque a través de
ella logra apertura, el horizonte como que se expande y
está mejor preparada para manejar distintas situaciones y para sostener una
buena conversación. Además, la lectura da tranquilidad y paz”.
NOTA: Este artículo es parte de la serie de entrevistas "Qué libros leen la profesionales puertorriqueñas del siglo XXI", 2003.
Información en: https://www.facebook.com/inconcluso.s.solteraconcompromiso
miércoles, 4 de junio de 2014
"La mejor manera de escribir bien es leyendo..."
Ivonne
Solla nació en Santurce. Tiene un Bachillerato en Artes y una Maestría en
Periodismo de la Universidad de Puerto Rico (UPR), recinto de Río Piedras.
Para
ella la lectura es una de las mejores formas de invertir su tiempo libre. Los
tres libros que más le han impactado en los últimos siete años son: El
alquimista, Confieso que he vivido y El amor en los tiempos del
cólera.
El alquimista, de Paulo Coelho, es el relato
de un muchacho pastor que recorre un largo sendero entre el mundo real y el
mundo de los sueños. Es, esencialmente, la historia de la humanidad en busca
del mayor tesoro que se anhela poseer: el sentido de la vida.
“Lo
más que a mí me impresiona de El alquimista es que en un vocabulario
sencillo hay lecciones filosóficas que si las aplicáramos, tanto a nivel
individual como colectivo, tendríamos un mejor mundo”.
Confieso que he vivido, de Pablo Neruda, es la
autobiografía en la que expone los principales episodios de su vida. A lo largo de estas memorias, el poeta
chileno habla sobre la concepción de su
arte y sobre los motivos que lo llevaron a defender sus posiciones políticas.
“Me
cautivó porque es una vida con diversidad de experiencias donde hubo apertura y
lo particular es que al final te plantea (como hizo también Borges) que si
tuviéramos más tiempo viviríamos más intensamente cada momento”.
El amor en los tiempos del
cólera, de Gabriel García Márquez, cuenta dos
historias: la de un amor secreto que culmina en la muerte y la de un amor que
hace de los tormentos su alimento. Una muchacha de 18 años rechaza al hombre de
quien ha estado enamorada y con quien le han impedido unirse. Más de 50 años
después, cuando ha muerto otro hombre con quien se ha casado, se reúne con
aquel primer amor.
“Las historias de él siempre son
mágicas, siempre son extraordinarias. Reúnen los elementos que necesita un buen
trabajo literario. Lo más que me cautivó de esta obra fue simplemente García
Márquez, el dominio del lenguaje, la capacidad de descripción”.
Cada
uno de estos libros ha impactado de alguna forma la vida de esta periodista. Y
en su trabajo profesional le han ayudado en la redacción. “La mejor manera de
escribir bien es leyendo”, afirmó.
“Los
criterios que utilizo para seleccionar lo que considero un buen libro son los
autores, que sus nombres constituyen una garantía por su prestigio, como García
Márquez. Cuando él publica un libro yo me desespero hasta tenerlo en mis manos
y no solamente hasta tenerlo en mis manos, a la vez que lo empiezo a leer se me
hace muy difícil detenerme. En un momento dado me pasó lo mismo con Isabel
Allende. Paulo Coelho es otra cosa, pero también tiene su mística muy
particular. Hay unos autores que son una garantía, los otros he tenido acceso a
ellos por referencia. Hay escritores que tienen renombre y los buscamos, hay
otros que tal vez no son tan conocidos y otra persona te los recomienda y
resulta que tuviste acceso a un libro excelente”.
Ivonne
Solla considera que la lectura ha mejorado grandemente su capacidad de
comunicación oral y escrita porque mientras más lee adquiere más vocabulario y
desarrolla sus destrezas de redacción.
Ella
piensa que para cada ser humano la lectura es fundamental. No importa si son
obras literarias, libros de autoayuda o lectura de revistas y periódicos. Lo
imprescindible es leer. “Yo creo que la
lectura es importante para cada ser humano, incluyo a los niños, a los jóvenes,
a los hombres y a las mujeres”.
NOTA: Este artículo es parte de la serie de entrevistas "Qué libros leen la profesionales puertorriqueñas del siglo XXI", 2003.
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