martes, 14 de agosto de 2012

“Yo no concibo que ningún ser humano pase por la vida sin leer...”



    “La lectura es fundamental. Yo no concibo que ningún ser humano pase por la vida sin leer. A mí me encanta la novela contemporánea latinoamericana escrita por mujeres como Laura Esquivel, Ángeles Mastretta, Isabel Allende y Marcela Serrano, entre otras. También me gusta leer sobre personajes históricos que han sido fundamentales en el desarrollo de la humanidad, como Nelson Mandela, Mahatma Gandhi y Martin Luther King”, comentó, entusiasmada, la licenciada Wilma Reverón Collazo.

    La licenciada Reverón nació en Nueva York y se crió en Puerto Rico. Estudió  Humanidades en la Universidad de Puerto Rico (UPR) y se graduó de abogada  de la Escuela de Derecho del recinto de Río Piedras. Regresó a Nueva York, y durante cinco años cabildeó ante el Comité Especial de Descolonización, representando al movimiento independentista de Puerto Rico. Lleva sobre 30 años ejerciendo la abogacía.
Desde el 1998 al 2000 fue presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y Constitucionales de Puerto Rico. Fungió como vicepresidenta del Colegio de Abogados desde el 2000 hasta el 2001 y en el 2002 se lanzó como candidata a la presidencia de dicha organización.

La licenciada Reverón aprecia profundamente la lectura. Los tres libros que más le han impactado en los últimos siete años son: Antigua vida mía, El largo camino hacia la libertad y El arte de la felicidad.

Antigua vida mía, de Marcela Serrano, es un relato que traza la búsqueda desde la infancia, los años 60 y el viaje a la ciudad de Antigua, de dos amigas: Violeta y Josefa. La novela recoge la problemática de las mujeres en torno a la violencia doméstica y los tropiezos y dificultades que enfrentan para sobreponerse a las tragedias personales. “Me impactó esta novela por la fuerza que proyectaba el personaje de Violeta. Una mujer que logró sobreponerse a algo tan difícil como fue el rechazo de la sociedad y de su familia después de haber asesinado a su esposo. La fuerza de ella como mujer es admirable”.

El largo camino hacia la libertad es la autobiografía de  Nelson Mandela, el que fue presidente de Sudáfrica y, además, Premio Nobel de la Paz. Él tuvo el liderato para luchar en contra del racismo en Sudáfrica y estuvo 28 años preso por esta causa.

“Es increíble la fuerza espiritual, el tesón y la voluntad que tuvo Nelson Mandela para enfrentarse al régimen racista de Sudáfrica, a la represión, a la lucha armada, etc. Él salió de todo eso victorioso, terminó presidiendo a su país y lo llevó a la liberación de ese yugo. Es un hombre excepcional para la historia”.

El arte de la felicidad, de Dalai Lama y Howard C. Cutler, es un libro que presenta un sistema ético que, lejos del dogma religioso o leyes y castigos, se basa en la razón, en el sentido común y tiene como meta la felicidad del individuo.

“Es un libro de crecimiento espiritual. Muestra cómo hay cosas terrenales que no nos permiten crecer y cómo podemos usar nuestras capacidades para amar, para perdonar, para tener compasión y solidaridad. Entiendo que esos son los valores a los cuales debe aspirar la humanidad”.

Para la licenciada Reverón la lectura ha fortalecido las ideas en las que ella siempre ha creído.  “Son lecturas que han reafirmado mis convicciones políticas, personales y espirituales”.

En cuanto a su desempeño profesional, afirma que  estas lecturas le han sido muy útiles. “Yo creo que la abogacía es una profesión que tiene que tener como norte el servicio a las demás personas, la compasión, la solidaridad y la fortaleza para uno enfrentarse a situaciones conflictivas y tratar de ser un buen mediador. Los abogados tenemos que defender los intereses y derechos de nuestros clientes, pero también hay veces que tenemos que servir de mediadores. Uno tiene que tener la capacidad para distinguir cuándo su rol es el de abogar para un lado solamente, y cuándo tú beneficias mejor los intereses de tu cliente tratando de mediar, en una situación conflictiva, y buscar el mejor beneficio para él o para ella. En la medida en que tú eres una persona más segura de ti misma y más clara en tus valores y convicciones, yo entiendo que eres mejor profesional”.

La licenciada Reverón piensa que la lectura es indispensable para la mujer actual. “Las mujeres somos el género que se ha sentido más solitario, rezagado e invisible, en muchas ocasiones. Cuando una lee lo que están escribiendo otras mujeres, una encuentra muchas similitudes, afinidades y coincidencias en la forma de ver e interpretar el mundo. Leyendo a las mujeres escritoras una se siente reivindicada, siente que tiene una voz que está hablando por una. Te sientes menos sola”.

*Este artículo es parte de una serie de entrevistas bajo el título "Qué libros leen las profesionales puertorriqueñas del siglo XXI",  2003.


“Para mí la lectura es como respirar...”*



“En mi profesión la lectura es esencial. La palabra es nuestro instrumento de trabajo, así que  para mí la lectura es como respirar. Todos los días tengo que leer, expresó la licenciada y profesora Esther Vicente Rivera.

La licenciada Vicente nació en Cayey y lleva sobre 30 años en el campo de las leyes. Se graduó de abogada de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico (UPR). Hizo una maestría en Teoría del Derecho y un doctorado en Derecho de las Mujeres y Derechos Humanos en la Universidad de Londres, Inglaterra.

Esta abogada ha trabajado en la práctica privada y en el servicio público. Enseñó en la Escuela de Comunicación Pública de la UPR, y como catedrática auxiliar de la Facultad de Derecho de la Universidad Interamericana. Además hace consultorías de prevención de violencia a distintas entidades. También participa en foros en los cuales se discute sobre los asuntos de la mujer y el derecho, y colabora, voluntariamente, para la Organización Profamilia.

La licenciada Vicente afirma que desde pequeña le ha gustado leer. Los tres libros que más le han impactado en los últimos siete años son: Leyes, crímenes y sexualidad, Viaje al depósito de los lunáticos y Sirena Selena vestida de pena.

Leyes, crímenes y sexualidad, de Carol Smart, es un texto en el que la autora plantea que el derecho se ha utilizado para oprimir a las mujeres. Dice, además,  que el proyecto de cambiar el derecho para beneficio de las mujeres no necesariamente va a eliminar la opresión de las mujeres.

“Yo estaba trabajando para mi tesis con una evaluación de la ley 54 y este libro me ayudó bastante a hacer mi análisis. Pude usar como referencia alguna de las ideas de la autora. El trabajo de ella me ayudó muchísimo a consolidar mi visión sobre el derecho y sobre la lucha de las mujeres en el campo de las leyes”.

Viaje al depósito de los lunáticos, de Kate Millett, es un relato autobiográfico en el que la autora narra su experiencia con una condición de salud mental: bipolaridad.  Explica cómo es que se manifiesta esa enfermedad y describe lo que le pasa cuando sufre los episodios de bipolaridad. Además, elabora su teoría de cuál es el mejor tratamiento para esa condición y aboga porque se use el tratamiento de terapia de persona a persona y no los medicamentos. Según ella, estos tienen un impacto negativo sobre la creatividad del paciente.

  “Me impresionó mucho este libro porque lo escribió una persona que yo había admirado a la distancia y de la cual no sabía nada, solamente había leído sus libros de teoría feminista. Para mí fue una gran experiencia no solo porque me permitió entender un poco mejor esa condición de salud mental, sino también porque pude conocer algo íntimo de la autora”.

Sirena Selena vestida de pena, de Mayra Santos-Febres, es la historia de un adolescente homosexual que se ha echado a la calle para ganarse la vida y que posee el don especial de una voz dulce, cristalina y fresca. Esta novela explora el mundo de las ambigüedades de la sexualidad y de los travestis.

“Lo que me llamó la atención de esta novela es que presenta la vida interior de unas personas que viven al margen de la sociedad, y que aunque luchamos por sus derechos desconocemos qué es lo que pasa en su intimidad. Me impresionó la claridad con la que la autora describe a los personajes. Cuando leí la novela estaba trabajando con unos clientes que eran homosexuales y transexuales y la lectura de esta novela me facilitó comprenderlos mejor”.

A la licenciada y profesora Vicente le preocupa que se esté perdiendo o que esté disminuyendo el hábito de la lectura. Ella tiene un genuino interés por este y comparte con un grupo de amigas un círculo de lectura. Se reúnen y discuten distintos libros previamente asignados. “Esta práctica es muy interesante y la disfrutamos mucho”.

En cuanto a la importancia de la lectura para la mujer actual comentó: “La lectura es importante para la mujer de hoy como para la mujer de ayer. Es esencial. Es necesario sacar tiempo para leer porque podemos mejorar nuestra capacidad de comunicación y también nos ayuda a  formarnos como seres humanos. En los libros se puede encontrar una guía y una respuesta a cualquier problema o situación personal. Yo pienso que al que le gusta leer nunca se siente solo. Si disfrutas de la lectura mantienes una conexión con el resto del mundo”.

*Entrevista publicada en el Semanario Claridad, junio 2004. *Este artículo es parte de una serie de entrevistas bajo el título "Qué libros leen las profesionales puertorriqueñas del siglo XXI",  2003.

“Si no leo siento que no aprendo...”*



“Si no leo siento que no aprendo. Yo no recuerdo ningún momento en mi vida en que no haya estado leyendo”, comentó la licenciada Ana Irma Rivera Lassén.

         Esta no solo se distingue como abogada, sino también como cofundadora de la organización Mujer Intégrate Ahora (MIA), miembro de Feministas en Marcha y portavoz, en Puerto Rico, del Comité de América Latina y del Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM).

La licenciada Rivera Lassén es oriunda de Santurce y graduada de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico. Fue reconocida, en marzo de 2003, por el Senado del Estado Libre Asociado de Puerto Rico con la medalla Capetillo Roqué. Este premio se le otorgó en reconocimiento por sus aportaciones para lograr la equidad de género y mejorar las condiciones sociales de la mujer. Esta abogada, además, ha fungido como profesora, columnista de periódicos y editora de revistas. Ha publicado artículos, ensayos, cuentos y poesías en revistas y antologías de Puerto Rico y del extranjero.

Es coautora de dos libros: Y algo más..., un libro de cuentos y poesía, y Documentos del feminismo en Puerto Rico: facsímiles de la historia, un texto histórico de las mujeres en Puerto Rico a partir de los años 70.

Para la licenciada Rivera Lassén la lectura es como el pan nuestro de cada día. Los tres libros que más le han impactado en los últimos siete años son: Cuando el género suena cambios trae, La ley del amor y 1984.

        Cuando el género suena cambios trae, de Alda Facio, es un texto de metodología de  análisis para las cuestiones jurídicas de las mujeres usando una perspectiva de género. “Este texto me ha dado un marco de referencia teórica. El libro me ha sido útil, en términos académicos, para sustentar muchas de las cosas que enseño y que escribo”.

     La ley del amor, de Laura Esquivel, es la historia de la pasión amorosa (de Azucena y Rodrigo) que sobrevive desde la caída del Imperio de Moctezuma, hasta el siglo XXIII en la ciudad de México. “Esta novela me gustó mucho porque a mí me encanta el tema de la reencarnación. Me pareció interesante que la autora logró un relato casi cinematográfico y, además, lo hizo interactivo. Me impactó porque encontré una buena combinación entre literatura con ciencia ficción y cibernética. No es frecuente encontrar a una mujer que escriba de esos temas manteniendo, además, una narración muy femenina”.

      1984, de George Orwell, es un libro que plantea, en 1948, un supuesto mundo futurible (1984) donde reinan una serie de curiosos ministerios que manipulan, engañan y alienan al pueblo.

       “Yo lo leí hace muchos años, pero lo volví a leer hace poco. Si me impactó la primera vez que lo leí, ahora me impactó mucho más porque me doy cuenta que el autor, en el 1948, estaba hablando de esta época. El libro habla de una sociedad dominada por la gran corporación donde existe un referente de poder que se llama “El gran hermano”. Este  controla todo lo que los humanos hacen en esa sociedad. Lo que plantea la novela es que la globalización y el capitalismo se han tragado todo el sistema económico, y ahora las fronteras se están cayendo y los países se están uniendo. Orwell entendía que todo esto iba a pasar en el 1984, pero está ocurriendo ahora”.

      “Estas lecturas me han ayudado a afinar mis pensamientos para poder expresar claramente mis ideas desde el ámbito personal hasta el jurídico.  En el caso de la novela de Laura Esquivel, por ejemplo, ella presenta los temas del amor y el perdón, y cuando una trabaja temas fuertes, como la violencia doméstica, el tema del perdón es muy difícil de manejar.  Una cosa es perdonar para seguir adelante y otra cosa, muy distinta,  es perdonar y volver con el agresor. Cuando yo hablo con clientas, a veces les pido que lean algunos libros, ya sean  de autoayuda u otro tipo de literatura, porque pueden servirles  muchísimo”.

       En cuanto a la importancia de la lectura para la mujer del siglo XXI, la licenciada Rivera Lassén  comentó: “Yo lamento mucho las mujeres que no se dan cuenta de que ni siquiera estarían en donde están si no fuera por todas las otras que lucharon antes. No reconocer la historia de nosotras es desmerecernos. La mujer actual no existe sin todas las anteriores y coetáneas, porque la complejidad de lo que somos es una suma de todas esas cosas. Tenemos que leer porque a nosotras no nos enseñan a ser mujer en términos históricos. Nos enseñan en unos términos bien estereotipados. Pero la cuestión de ser mujer en términos del conocimiento, de nuestra historia, nuestros quehaceres, nuestros haberes y nuestras luchas, esa no nos la enseñan. Esa la tenemos que  buscar y aprender nosotras. Y la única fuente es la lectura”.

*Este artículo es parte de una serie de entrevistas bajo el título "Qué libros leen las profesionales puertorriqueñas del siglo XXI",  2003.